La ivermectina es un fármaco antiparasitario de amplio espectro. Su ingrediente activo, también llamado ivermectina, actúa paralizando y matando parásitos internos y externos en humanos y animales.
La dosificación de ivermectina varía considerablemente según la afección que se esté tratando, el peso del paciente y la formulación del medicamento. Es absolutamente crucial seguir las indicaciones precisas de un médico o profesional de la salud. La automedicación y el uso de dosis incorrectas pueden ser peligrosos.
La ivermectina, (Stromectol), es un medicamento que se prescribe tanto a hombres como a mujeres.
Este medicamento se utiliza principalmente para tratar infecciones causadas por parásitos, incluyendo:
Oncocercosis (ceguera de los ríos): Infección causada por un gusano que puede provocar problemas en la piel y los ojos, incluyendo la ceguera.
Estrongiloidiasis: Infección causada por un gusano que afecta principalmente los intestinos.
Sarna (escabiosis): Infección cutánea causada por ácaros.
Pediculosis (piojos): Infestación por piojos.
Análogos del ingrediente activo (ivermectina):
Es importante tener en cuenta que la ivermectina es un ingrediente activo específico. No existen análogos directos que sean exactamente iguales. Sin embargo, otros fármacos antiparasitarios de la misma familia (avermectinas) incluyen:
Abamectina
Doramectina
Selamectina
Estos se utilizan principalmente en veterinaria.
Análogos con un efecto similar (antiparasitarios):
Albendazol: Antiparasitario de amplio espectro utilizado para tratar diversas infecciones por gusanos.
Mebendazol: Otro antiparasitario común, efectivo contra varios tipos de gusanos.
Praziquantel: Utilizado para tratar infecciones por trematodos y cestodos (gusanos planos).
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