La clorpromazina es un medicamento antipsicótico utilizado para tratar una variedad de condiciones, incluyendo esquizofrenia, trastorno bipolar (fase maníaca), náuseas y vómitos severos, hipo persistente y algunos problemas de comportamiento en niños.
Dosificación:
La dosificación de clorpromazina varía considerablemente según la condición a tratar, la gravedad de los síntomas y la respuesta individual del paciente. Es crucial seguir las indicaciones de un médico. A continuación, se presentan algunas pautas generales:
Esquizofrenia y otros trastornos psicóticos: La dosis inicial para adultos suele ser de 25-50 mg, administrada varias veces al día. La dosis puede aumentarse gradualmente según sea necesario, hasta un máximo de 800 mg por día en casos severos.
Trastorno bipolar (manía): La dosis inicial es similar a la utilizada para la esquizofrenia, ajustándose según la respuesta del paciente.
Náuseas y vómitos: La dosis suele ser de 25 mg, administrada cada 4-6 horas según sea necesario.
Hipo persistente: La dosis es generalmente de 25-50 mg, administrada varias veces al día.
Problemas de comportamiento en niños: La dosis debe ser determinada cuidadosamente por un médico, teniendo en cuenta el peso y la edad del niño.
Análogos de la Clorpromazina:
Si bien la clorpromazina es un medicamento específico, existen otros antipsicóticos que pertenecen a la misma clase o tienen mecanismos de acción similares. Algunos ejemplos incluyen:
Tioridazina
Levomepromazina
Perfenazina
Flufenazina
Trifluoperazina
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